El Viacrucis en Tamulté de las Barrancas conmovió a más de 10 mil personas con su representación emotiva y realista de la Pasión de Cristo. Desde el inicio, el silencio envolvió a los presentes, marcando cada paso de Jesús con una intensidad que conmovió corazones. Escenas como la traición de Judas o el sufrimiento de María transmitieron emociones profundas a la audiencia, que se unió en oración y reflexión por las calles de la comunidad. La crucifixión, recreada con realismo, generó un ambiente de pesar y reflexión sobre la fragilidad humana y la esperanza de la resurrección. Al final, entre lágrimas y aplausos, la celebración dejó huellas imborrables de fe y comunidad en todos los presentes.
La representación de fe del Viacrucis de Tamulté conmueve con su emotividad.
