El Papa Francisco no lideró el Vía Crucis del Viernes Santo en Roma debido a su salud. Aunque no estuvo presente físicamente, sus reflexiones fueron leídas durante la ceremonia. El evento fue presidido por el cardenal Baldassare Reina y contó con la participación de diversas personas, reflejando un mensaje inclusivo. En sus palabras, el Papa alertó sobre la influencia de intereses económicos en la sociedad y abogó por la paz. A pesar de su convalecencia, el Papa realizó una visita a una cárcel romana en Semana Santa. Su participación en la bendición del Domingo de Resurrección aún no está confirmada. Su mensaje de reflexión, compasión y esperanza perdura en su ausencia.
El Vía Crucis en el Coliseo romano fue iluminado por las reflexiones del papa Francisco.
