Fitch Ratings ratificó la calificación soberana de México en “BBB-” con perspectiva estable debido a la estabilidad macroeconómica y la diversificación de su economía. A pesar de esto, la agencia señaló limitantes como el crecimiento económico moderado, debilidades en gobernanza y retos fiscales. Fitch ajustó a la baja su pronóstico económico para el país, anticipando una contracción del PIB en 2025 y un crecimiento marginal en 2026. También alertó sobre la vulnerabilidad de México ante posibles medidas proteccionistas de EE.UU., lo que podría impactar significativamente en la economía mexicana.
Fitch ha confirmado la calificación crediticia de México en “BBB-”, aunque ha señalado posibles riesgos económicos.
