Un estudio revela que mascar chicle libera microplásticos en la saliva, sumándose a la contaminación plástica diaria. Aunque no se ha demostrado su impacto en la salud, los microplásticos están presentes en nuestra vida cotidiana. Los chicles contienen polímeros que al masticar se fragmentan en partículas diminutas que terminan en la saliva. Se han encontrado partículas de 82 micrómetros, aunque podría haber más pequeñas. También se detectaron compuestos utilizados en empaques de alimentos en chicles \”naturales\”. Expertos sugieren precaución ante la presencia de microplásticos en alimentos y bebidas. El chicle mal desechado puede contribuir a la contaminación plástica en el medio ambiente.
Un estudio ha descubierto que masticar chicle libera microplásticos en la boca.
