La Secretaría de Energía presentó un decreto que busca revertir reformas neoliberales en el sector energético en México. Las leyes fortalecen a Pemex y CFE como empresas públicas, garantizando su autosuficiencia. Se destaca la reconfiguración de sus consejos de administración con políticas de austeridad. La CFE tendrá prevalencia en el mercado eléctrico, sin aumentar tarifas. Se promueve la transición hacia fuentes sustentables y se simplifican procesos de planeación. Se actualiza el marco legal para la geotermia y se introduce una tasa única en los ingresos petroleros. Estas reformas buscan consolidar un modelo energético basado en la soberanía y la justicia social.
El Gobierno fortalece la soberanía energética mediante la aprobación de 11 nuevas leyes destinadas a Pemex y CFE.
