La refinería Olmeca de Dos Bocas, prometida como la clave para la soberanía energética, ha enfrentado un descontrol financiero. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó irregularidades por 17.2 millones de pesos en contratos, incluyendo sobrecostos y falta de documentación. A pesar de ser inaugurada, la refinería no ha alcanzado su producción prometida y su rentabilidad es incierta. Las auditorías revelan contratos sin control, adjudicaciones directas y sobrecostos normalizados. La ASF documentó descontrol financiero, falta de aplicar penalizaciones y gastos sin comprobación. La refinería sigue sin producir combustibles a plena capacidad, incumpliendo plazos sin sanciones. El desorden administrativo y los sobrecostos continúan acumulándose sin consecuencias.
Se transaron 17.2 millones de pesos en el proyecto Dos Bocas.
