La presidenta Claudia Sheinbaum elogió la IX Cumbre de la CELAC como una oportunidad para fortalecer la unidad latinoamericana y caribeña. Destacó la importancia de ampliar la integración regional y resaltó los lazos culturales de la región. A pesar de su apretada agenda, asistirá a la cumbre y presentará un plan energético clave para contrarrestar aranceles de EE. UU. Su enfoque diplomático y económico muestra el equilibrio de su gobierno. Optó por un mensaje conciliador con Ecuador, enfatizando un enfoque feminista en la diplomacia. La cumbre se convierte en una plataforma para proyectar su liderazgo regional, tejiendo alianzas ante desafíos globales.
La idea de Sheinbaum es que a través de la CELAC se podría alcanzar la unidad en América Latina.
